Lo ultimo. Antirobo lanzallamas!!Resulta que en Sudáfrica estaban hartos de que por uno u otro método les robaran el coche, así que inventaron este método expeditivo y radical.
¿El funcionamiento? Simple. Y mortal, por cierto: dos mangueras de gas que apenas sobresalen unos milímetros por debajo del coche. En cuanto se acerque alguien por alguno de los lados y empiece a manosear las puertas, ventanilla o cerradura, dos enormes chorros de fuego lo fríen. Literalmente.
Antirobo de llantas!!Unas fundas paras las ruedas, jajajaja!